Durante más de 15 años me desempeñé como contador público en relación de dependencia. Conocía bien el camino del trabajo tradicional: cumplir horarios, entregar resultados, seguir estructuras. Y aunque agradezco todo lo que aprendí en ese tiempo, algo dentro de mí empezó a inquietarse.

Hace unos cinco años, en medio de esa rutina diaria, sentí el llamado de algo más profundo. Comencé a explorar temas que hasta ese momento no formaban parte de mi mundo profesional: la mentalidad, el crecimiento personal, la lectura con propósito. Me uní a un club de lectura para el alma, donde cada libro abría una nueva ventana de posibilidades dentro de mí.

Este proceso de transformación me llevó a un verdadero despertar de conciencia. Empecé a preguntarme:
¿Es este el único camino para vivir? ¿Qué pasaría si pudiera crear mi propio rumbo, trabajar bajo mis términos y construir algo que me permita tener libertad y plenitud?

Así fue como descubrí el mundo de los negocios online, la marca personal y la inteligencia artificial. Me di cuenta de que no era tarde para reinventarme, que mis años de experiencia y mi pasión por ayudar a otros podían convertirse en una nueva forma de vivir y trabajar.